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Santiago_Pevensie · Publicado: Mie Sep 23, 2009 12:12 pm **Asunto**:

Muy bueno tu capitulo *Lady Lyla*, continualo,la ardilla que personaje!,Saludos.

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Miembro número 40 del

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**Lady Lyla** · Publicado: Dom Jul 04, 2010 6:28 pm **Asunto**:

Second Part

Nuevamente empezó a correr, mientras la ardilla, para no caerse, se aferró a su espalda. Unas sombras, seguidas de caballos montados por calormenes aparecieron a los lados de Susan.
Para esquivarlos, Susan les izo una finta al más cercano, y pasó por debajo del caballo que estaba más atrás. Los calormenes demoraron un poco en darse cuenta de lo escurridiza que resulto ser su presa. Susan esquivaba árboles en zigzag, sin disminuir el paso. Los calormenes apuraron el paso. Uno de ellos se posó casi al lado de Susan blandiendo su espada. Ella se metió entre dos árboles bastante juntos, logrando que el caballo se atascara. Dos calormenes aparecieron delante de Susan a toda velocidad, pero esta dobló bruscamente hacia la izquierda tambaleándose con un charco de barro. Uno de los calormenes no tuvo mejor suerte que Susan, y callo con caballo y todo al suelo. El otro casi alcanzó a Susan, pero dos ramas aparecieron de la nada, botando al calormen del caballo.
La ardilla gritaba eufórica.
-¡TOMEN CALORMENES! ¡Traten de detener a la reina de Narnia!-
Ante esa exclamación, Susan casi tropieza con unas ramas. Le hubiera dicho a la ardilla que se callara si hubiera podido hablar. Es más, ya hubiera parado si no fuera por la adrenalina, y sentía que si paraba, no volvería a correr otra vez. Había un pequeño claro un poco más adelante, rodeado de troncos caídos. Como si hubiera sido en cámara lenta, Susan salto uno de los troncos mientras veía un látigo rodeando sus piernas. Cayó secamente en el claro. La ardilla se arrastró un poco más allá bastante desorientada. Un dolor punzante se posó en el brazo de Susan. Se hubiera parado si no fuera por el dolor en la mano y el pecho, y el cansancio.
-Levántese, levántese- le dijo la ardilla tratando de ayudarla a pararse, pero un calormen la agarró de la cola
-No puedo creer que todo esto fue por una niña y una ardilla- dijo el calormen con una malvada sonrisa mirando a la ardilla y posando su pie sobre Susan.
Los demás calormenes llegaron casi todos juntos, uno embarrado y otro con sangre en su nariz. Este se bajo rápidamente del caballo, mientras sacaba su espada.
-No me importa sea quien sea, voy a matarla igual- dijo con odio dirigiéndose a Susan
-No quiero que la toques- le dijo el calormen que agarraba a la ardilla- Por lo menos no a ella
Los demás calormenes se quedaron callados mirándolo, parecía ser el líder. Este le pasó la ardilla a otro calormen, y se agachó para ver a Susan. Le levantó la cara para verla mejor, y esta vio que él era muy feo.
-Es blanca- dijo este sorprendido- Hace mucho que no vemos a alguien con este color de piel
-Tal vez venga de los Contrarios- dijo el calormen embarrado
-¿Con esas ropas?- dijo el que tenía a la ardilla
-Tal vez no venga ni de este mundo- susurró el líder- escuche que esa ardilla te llamó reina
Susan abrió bien los ojos en señal de sorpresa, pero no dijo nada. El calormen enfurecido agarró a Susan del cuello del abrigo, obligándola a pararse y la amenazó
-¡Más te vale que hables, o…!
-O nada- lo interrumpió el líder con una voz que, de verdad, daba miedo
El calormen dejo lentamente a Susan en el suelo, sin cambiar su cara de odio.
-Amárrenla. Hay otras formas de persuadir a alguien para que te de información sobre sí mismo-
Los calormenes bajaron de sus caballos. El que había caído en el barro ató a Susan (bastante fuerte), mientras que el que tenía a la ardilla sacó su espada, y con una horrible sonrisa, la puso bajo su cuello.
-Ahora- dijo el líder –quiero que me digas quién eres
-Le diré si suelta a la ardilla- dijo Susan blanca como la nieve
-Al parecer, no tedas cuenta en la situación en que estas- dijo lentamente el líder- así que será mejor que NO me contradigas
El calormen que tenía a la ardilla le acercó aún más la espada. Esta estaba petrificada. Susan sudaba frió.
-¿Eres la reina perdida de Narnia, SÍ o NO?-
Susan tiritaba. No se sentía reina de ningún lado, pero sabía que si decía que no, matarían a la ardilla, y si decía que sí, la matarían a ella. El calormen la fulminó con la mirada.
-Sí- susurró Susan agachando la mirada
Un ruido extraño corto el sí de Susan, y se posó en el líder. Este, se tambaleo y callo. Todos quedaron quietos ante esta reacción, hasta que…
-¡ATACAN!-
Los calormenes se pusieron en guardia. Otra flecha llegó justo al brazo del calormen que sostenía a la ardilla, haciendo que este, por el dolor, la soltara. Unas sombras aparecieron de entre los árboles. Los calormenes que quedaban montaron sus caballos, pero estas sombras fueron más rápidas que ellos. Una batalla confusa rodeo a Susan, la cual empezó a moverse como pudo entre el desorden (seguía atada). Logró salir, no sabe cómo, del sector de la batalla, pero se dio cuenta que había un extraño silencio. Eso no le dio buena espina. Un par de piernas pequeñas cayeron justo delante de Susan, haciendo que esta casi muriera de un infarto. Algo la agarro del cuello, la paró y le cortó las amarras.
Recién después de eso, Susan se dio cuenta de quienes habían atacado a los calormenes y, de alguna forma, la habían rescatado: Un fauno, dos enanos y un centauro, el cual llevaba a la ardilla en uno de sus hombros.

Violin